Domingo, 28 de Noviembre de 2010. Para muchos, un domingo más de un fin de semana más. Sin embargo, para todos los cristianos del mundo es un día muy especial: es el primer domingo de Adviento.
Desde hoy hasta la madrugada del 25 de Diciembre, para todos nosotros se inicia un periodo de renovación, de conversión, de esperanza y de alegría.
Nos ponemos manos a la obra para renovar nuestro interior, sacando y tirando todo aquello que se ha convertido en un lastre para nuestro vivir. También remozamos todo lo hermoso que teníamos guardado y sin usar desde hacía tiempo.
Reconvertimos nuestra apatía y desgana, hartos de nadar contracorriente, con renovadas fuerzas, para poder alcanzar la meta, ésa que se nos muestra como un niño recién nacido, símbolo de la esperanza de nuestro mundo.
Tenemos la obligación de contagiar esta alegría a los demás, de compartir este inmenso tesoro que es la fe con los que nos rodean, especialmente con los más pequeños, aquellos que son capaces de aceptar este regalo sin prejuicio alguno, sólo con la inocencia y la ilusión de lo que son: niños.
Para ello, un símbolo en forma de abeto repleto de todos sus deseos, a los que sumamos los de este humilde grupo de catequistas cuya única esperanza es que la Luz de Cristo esté por siempre encendida en un rincón de sus corazones, para no apagarse jamás. ¡Marana tha!
2 comentarios:
Mi querida amiga caminemos en oración, con alegría y esperanza al encuentro del Señor.
¡Ven Señor Jesús!
Un súperabrazo.
Hola mi amiga del alma ya sé quien eres, la más preciosa de la foto, aunque las demás amigas son guapísimas.
Un súper abrazo. Gracias por pasar por Perlitas... me encanta leer tus comentarios.
Besitos para tí y tus amigas
muuuaaaccsss
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